PARA MEMORIZAR:
«Le dijo entonces Pilato: "Luego, ¿eres tú rey?". Respondió Jesús: "Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz"» ( Juan 18: 37 ).

 
Lección 11: Para el 15 de marzo de 2025
¿QUÉ MÁS PUDE HACER?



- Audio Lección -

MARTES 11 DE MARZO

El cántico de mi amado

Dios ha manifestado asombrosamente su amor y su justicia en medio del Conflicto Cósmico. Sin embargo, algunos podrían preguntarse: ¿Debería Dios haber hecho más de lo que hizo para prevenir y/o eliminar el mal? Como hemos visto, el trasfondo del Conflicto Cósmico muestra el respeto de Dios por el libre albedrío necesario para que pudiera existir una relación de amor perfecta entre él y la humanidad. Además, Dios se ciñó a ciertas limitaciones morales o reglas de enfrentamiento en el contexto de una disputa cósmica acerca de su carácter, algo que solo puede resolverse mediante la demostración de su amor.

Lee Isaías 5: 1 al 4.    CB    ¿Quién habla en estos versículos? ¿De quién habla Isaías? ¿A quiénes representan la viña y el viñador? ¿Qué significan las acciones del viñador en favor de la viña? ¿Cuál es el resultado?

En estos versículos, Isaías canta una canción acerca de su amada, caracterizada como una viña. El dueño de la viña es Dios mismo, y la viña representa al pueblo de Dios (ver, por ejemplo, Isa. 1: 8;    CB    Jer. 2: 21    CB    ). Pero las implicaciones pueden aquí ampliarse e incluir la obra de Dios en el mundo. Según estos versículos, el dueño de la viña (Dios) hizo todo lo que razonablemente cabía esperar para asegurar el florecimiento de su viña. Esta debería haber producido buenas uvas, pero solo produjo «uvas silvestres», que otras traducciones denominan «sin valor». De hecho, la expresión hebrea así traducida significa literalmente «fruto apestoso». En otras palabras, la viña de Dios produjo uvas podridas.

En Isaías 5: 3    CB    , Dios mismo invita a las personas a «juzgar» entre él y su viña. Y en Isaías 5: 4    CB    , él plantea la pregunta más importante: «¿Qué más se podía hacer a mi viña, que yo no haya hecho en ella? ¿Cómo, esperando yo que diera uvas buenas, ha dado uvas silvestres?». ¿Qué más pudo hacer? ¡Cuán asombroso es que incluso pida a otros que evalúen lo que hizo!

Cuando contemplamos la Cruz, donde Dios se ofreció a sí mismo como sacrificio por nuestros pecados, ¿cómo adquieren sus palabras («¿qué más se podía hacer a mi viña, que yo no haya hecho en ella?») un significado asombroso?


Comentarios de Elena GW

Dios en su Hijo había estado buscando fruto y no lo había encontrado. Israel era un estorbo en la tierra. Su misma existencia era una maldición; pues ocupaba en la viña el lugar que podía haber servido para un árbol fructífero. Despojaba al mundo de las bendiciones que Dios se proponía darle. Los israelitas habían representado mal a Dios entre las naciones. No eran meramente inútiles, sino un obstáculo decidido. En gran medida su religión descarriaba a la gente, y obraba la ruina en vez de la salvación.

En la parábola, el viñero no pone objeción a la afirmación de que si el árbol permanecía infructífero debía ser cortado; pero conoce y comparte los intereses del dueño en cuanto a aquel árbol estéril. Nada podía darle mayor placer que verlo crecer y fructificar. Responde al deseo del dueño diciendo: "Déjala aún este año, hasta que la excave y estercole. Y si hiciere fruto, bien".

El viñero no rehúsa trabajar por una planta tan poco promisoria. Está listo a prodigarle más cuidado aún. Hará más favorable su ambiente y le prodigará la máxima atención (Palabras de vida del gran Maestro, p. 170).

En las colinas de Palestina, nuestro Padre celestial había plantado su buena Vid, y él mismo era el que la cultivaba. Muchos fueron atraídos por la hermosura de esta Vid, y declararon su origen celestial. Pero para los dirigentes de Israel parecía como una raíz en tierra seca. Tomaron la planta, la maltrataron y pisotearon bajo sus profanos pies. Quería destruirla para siempre. Pero el celestial Viñador no la perdió nunca de vista. Después que los hombres pensaron que la habían matado, la tomó y la volvió a plantar al otro lado de la muralla. Ya no se vería el tronco. Quedaría oculto de los rudos asaltos de los hombres. Pero los sarmientos de la Vid colgaban por encima de la muralla. Habían de representarla. Por su medio, se podrían unir todavía inyectados a la Vid. De ella se ha ido obteniendo fruto. Ha habido una cosecha que los transeúntes han arrancado (El Deseado de todas las gentes, p. 629).

¿Podría Dios habernos dado prueba mayor de su amor que al dar así a su Hijo para que pase por estas escenas de sufrimiento? Y como el don de Dios al hombre fue el don gratuito de su amor infinito, así sus derechos a nuestra confianza, nuestra obediencia, todo nuestro corazón y la riqueza de nuestros afectos, son correspondientemente infinitos. Requiere todo lo que el hombre puede dar. La sumisión de nuestra parte debe ser proporcional al don de Dios. Debe ser completo, sin ninguna reserva. Todos somos deudores de Dios. Él tiene sobre nosotros derechos que no podemos satisfacer sin entregarnos en sacrificio pleno y de buen grado. Exige nuestra obediencia pronta y voluntaria, y no aceptará nada que no llegue a esto (Testimonios para la iglesia, t. 3, pp. 407, 408).


Juan 8:54-58   

1 Corintios 1:26-29   

26 Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; 27 sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; 28 y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, 29 a fin de que nadie se jacte en su presencia.


Génesis 18:25

25 Lejos de ti el hacer tal, que hagas morir al justo con el impío, y que sea el justo tratado como el impío; nunca tal hagas. El Juez de toda la tierra, ¿no ha de hacer lo que es justo?

Deuteronomio 32:4

4 El es la Roca, cuya obra es perfecta,Porque todos sus caminos son rectitud;Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él;Es justo y recto.

1 Samuel 3:18

18 Y Samuel se lo manifestó todo, sin encubrirle nada. Entonces él dijo: Jehová es; haga lo que bien le pareciere.

Salmos 145:17

17 Justo es Jehová en todos sus caminos,Y misericordioso en todas sus obras.

Daniel 4:37

37 Ahora yo Nabucodonosor alabo, engrandezco y glorifico al Rey del cielo, porque todas sus obras son verdaderas, y sus caminos justos; y él puede humillar a los que andan con soberbia.

Habacuc 1:13

13 Muy limpio eres de ojos para ver el mal, ni puedes ver el agravio; ¿Por qué ves a los menospreciadores, y callas cuando destruye el impío al más justo que él,

Apocalipsis 15:3

3 Y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos son tus caminos, Rey de los santos.

Apocalipsis 12:10

10 Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche.

Apocalipsis 13:6

6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su nombre, de su tabernáculo, y de los que moran en el cielo.

Job 1:1-22

1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. 2 Y le nacieron siete hijos y tres hijas. 3 Su hacienda era siete mil ovejas, tres mil camellos, quinientas yuntas de bueyes, quinientas asnas, y muchísimos criados; y era aquel varón más grande que todos los orientales. 4 E iban sus hijos y hacían banquetes en sus casas, cada uno en su día; y enviaban a llamar a sus tres hermanas para que comiesen y bebiesen con ellas. 5 Y acontecía que habiendo pasado en turno los días del convite, Job enviaba y los santificaba, y se levantaba de mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque dijo Job: Quizás habrá pecado mis hijos, y habrán blasfemado contra Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días. 6 Un día vino a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios, entre los cuales vino también Satanás. 7 Y dijo Jehová a Satanás: ¿De dónde vienes? Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: De rodear la tierra y de andar por ella. 8 Y Jehová dijo a Satanás: ¿No ha considerado a mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal? 9 Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: ¿Acaso teme Job a Dios de balde? 10 ¿No le ha cercado alrededor a él ya su casa ya todo lo que tiene? Al trabajo de sus manos ha dado bendición; por tanto, sus bienes han aumentado sobre la tierra. 11 Pero

extiende ahora tu mano y toca todo lo que tiene, y verás si no blasfema contra ti en tu misma presencia. 12 Dijo Jehová a Satanás: He aquí, todo lo que tiene está en tu mano; solamente no pongas tu mano sobre él. Y salió Satanás de delante de Jehová. 13 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, 14 y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, 15 y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. 16 Aún estaba éste hablando, cuando vino otro que dijo: Fuego de Dios cayó del cielo, quemó las ovejas ya los pastores, y los consumió; solamente escapé yo para darte la noticia. 17 Todavía estaba éste hablando, y vino otro que dijo: Los caldeos hicieron tres escuadrones, y arremetieron contra los camellos y se los llevaron, y mataron a los criados a filo de espada; y solamente escapé yo para darte la noticia. 1SEntre tanto que éste hablaba, vino otro que dijo: Tus hijos y tus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en casa de su hermano el primogénito; 19 y un gran viento vino del lado del desierto y azotó las cuatro esquinas de la casa, la cual cayó sobre los jóvenes, y murieron; y solamente escapé yo para darte la noticia. 20 Entonces Job se levantó, y rasgó su manto, y rasuró su cabeza, y se postró en tierra y adoró, 21 y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volvió allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito. 22 En todo esto no pecó Job, ni atribuyó a Dios despropósito alguno.

Job 2:1-13

1 Aconteció que otro día vinieron los hijos de Dios para presentarse delante de Jehová, y Satanás vino también entre ellos presentándose delante de Jehová. 2 Y dijo Jehová a Satanás: ¿De dónde vienes? Respondió Satanás a Jehová, y dijo: De rodear la tierra, y de andar por ella. 3 Y Jehová dijo a Satanás: ¿No ha considerado a mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal, y que todavía retiene su integridad, aun cuando tú me incitaste contra él para que lo arruinara sin

causa? 4 Respondiendo Satanás, dijo a Jehová: Piel por piel, todo lo que el hombre tiene dar por su vida. 5 Pero extiende ahora tu mano, y toca su hueso y su carne, y verás si no blasfema contra ti en tu misma presencia. 6 Y Jehová dijo a Satanás: He aquí, él está en tu mano; mas guarda su vida. 7 Entonces salió Satanás de la presencia de Jehová, e hirió a Job con una sarna maligna desde la planta del pie hasta la coronilla de la cabeza. 8 Y tomó Job un tiesto para rascarse con él, y estaba sentado en medio de ceniza. 9 Entonces le dijo su mujer: ¿Aún retienes tu integridad? Maldice a Dios, y muérete. 10 Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, ha hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios. 11 Y tres amigos de Job, Elifaz temanita, Bildad suhita, y Zofar naamatita, luego que oyeron todo este mal que le había sobrevenido, vinieron cada uno de su lugar; porque habían convenido en venir juntos para condolerse de él y para consolarle. 12 Los cuales, alzando los ojos desde lejos, no lo conocieron, y lloraron a gritos; y cada uno de ellos rasgó su manto, y los tres esparcieron polvo sobre sus cabezas hacia el cielo. 13 Así se sentaron con él en tierra por siete días y siete noches, y ninguna le hablaba palabra, porque veían que su dolor era muy grande.

Zacarías 3:1-2

1 Me mostró al sumo sacerdote Josué, el cual estaba delante del ángel de Jehová, y Satanás estaba a su mano derecha para acusarle. 2 Y dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es éste un tizón arrebatado del incendio?

Judas 1

1 Judas, siervo de Jesucristo, y hermano de Jacobo, a los llamados, santificados en Dios Padre, y guardados en Jesucristo: 2 Misericordia y paz y amor os sean multiplicados. 3 Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido

necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos. 4 Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que se convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, ya nuestro Señor Jesucristo. 5 Mas quiero recordaros, ya que una vez lo habéis sabido, que el Señor, habiendo salvado al pueblo sacándolo de Egipto, después destruyó a los que no creyeron. 6 Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día; 7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno. 8 No obstante, de la misma manera también estos soñadores mancillan la carne, rechazan la autoridad y blasfeman de las potestades superiores. 9 Pero cuando el arcángel Miguel contendía con el diablo, disputando con él por el cuerpo de Moisés, no se atrevió a proferir juicio de maldición contra él, sino que dijo: El Señor te reprenda. 10 Pero estos blasfeman de cuantas cosas no conocen; y en las que por naturaleza conocen, se corrompen como animales irracionales. 11 !!Ay de ellos! porque han seguido el camino de Caín, y se lanzaron por lucro en el error de Balaam, y perecieron en la contradicción de Coré. 12 Estos son manchas en vuestros ágapes, que comiendo impúdicamente con vosotros se apacientan a sí mismos; nubes sin agua, llevadas de acá para allá por los vientos; árboles otoñales, sin fruto, dos veces muertos y desarraigados; 13 fieras ondas del mar, que espuman su propia verg:uenza; estrellas errantes, para las cuales está reservada eternamente la oscuridad de las tinieblas. 14 De éstos también profetizó a Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares, 15 para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él. 16Estos son murmuradores, querellosos, que andan según sus propios deseos, cuya boca habla cosas infladas, adulando a las personas para sacar provecho. 17 Pero

vosotros, amados, tened memoria de las palabras que antes fueron dichas por los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo; 18 los que os decían: En el postrer tiempo habrá burladores, que andarán según sus malvados deseos. 19 Estos son los que causan divisiones; los sensuales, que no tienen al Espíritu. 20 Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo, 21 conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para la vida eterna. 22 A algunos que dudan, convencidos. 23 A otros salvad, arrebatándolos del fuego; y de otros tened misericordia con temor, aborreciendo aun la ropa contaminada por su carne. 24 Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría, 25 al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén.

Juan 12:31

31 Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera.

Juan 14:30

30 No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí.

Juan 16:11

11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.

Hechos 26:18

18 para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados.

2 Corintios 4:4

4 en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios.

Efesios 2:2

2 en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia,

1 Juan 5:19

19 Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno.

Romanos 3:25-26

25 a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, 26 con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.

Romanos 5:8

8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.

Juan 6:35    CB   

35 Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.

Juan 6:41

41 Murmuraban entonces de él los judíos, porque había dicho: Yo soy el pan que descendió del cielo.

Juan 6:48

48 Yo soy el pan de vida.

Juan 6:51

51 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.