PARA MEMORIZAR:
Entonces miré y vi al Cordero de pie sobre el monte Sion, y con él ciento cuarenta y cuatro mil que tenían el nombre del Cordero y el nombre de su Padre escrito en sus frentes" (Apoc. 14:1).
 

Lección 8: Para el 24 de mayo de 2025

EN LOS SALMOS - PRIMERA PARTE





- Audio Lección -

Sábado 17 de mayo

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Hebreos 9:11-15; Salmo 122; Salmo 15; Salmo 24; Éxodo 33:18-23; Salmo 5; Salmo 51:7-15.

PARA MEMORIZAR:
Entonces miré y vi al Cordero de pie sobre el monte Sion, y con él ciento cuarenta y cuatro mil que tenían el nombre del Cordero y el nombre de su Padre escrito en sus frentes" (Apoc. 14:1).    CB   

Como adventistas del séptimo día, estamos acostumbrados a buscar los símbolos del Apocalipsis en el Antiguo Testamento para entender qué representan. Una fuente de información particularmente provechosa es el libro de Salmos, la colección de poesía sagrada que explora numerosas experiencias humanas e interacciones posibles con Dios: desde el abatimiento por el pecado y el sufrimiento hasta la alegría desbordante en su presencia y sus reiteradas promesas de perdón y salvación.

Una lectura atenta de los Salmos aporta detalles que hacen revivir el libro de Apocalipsis, especialmente el capítulo 14, donde se describe la obra final de la iglesia remanente de Dios en la Tierra. Se ha encomendado al pueblo de Dios de los últimos días la misma misión que al antiguo Israel: ser luz para las naciones y presentar el último llamado misericordioso a todos los pueblos para que adoren y obedezcan a su Creador.

Algunos detalles contenidos en el libro de Salmos, el himnario de Dios, pueden mostrarnos nuevas formas de entender y apreciar nuestro papel en los momentos finales de la historia de la Tierra.


Reavivados por su Palabra: Hoy, Génesis 31    CB   


Comentarios Elena G.W

El Nuevo Testamento nos abre la rica trascendencia de la historia del Antiguo Testamento. Alabado sea el Señor, oh alma mía. Debemos escudriñar cuidadosamente el Antiguo Testamento, pues es un tesoro de conocimiento. En la liberación de los hijos de Israel de la esclavitud egipcia, la columna de nube estuvo sobre aquel pueblo en movimiento, denominado, como una sombra de día durante cuarenta años. Por la noche esa nube se subió sobre ellos, testificando que Cristo, la Luz del mundo, iba a ser su fortaleza y su maestro y su líder... y ahora necesitamos ponernos toda la armadura, para que cualquier cosa que pueda surgir estemos preparados, mediante el poder impartido de Dios, para saber cómo enfrentar cada emergencia.

Debemos tener presentes constantemente las palabras de Cristo: "Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas". Juan 8:12 . Tenemos la Palabra de la historia del Antiguo y del Nuevo Testamento. Confia en Dios. Cristo es la Verdad, el Alfa de la historia del Antiguo Testamento, y todos sus tesoros son revelados con claridad e importancia por la historia del Nuevo Testamento.

Algunos dicen que la historia del Antiguo Testamento es la luz de la luna, la del Nuevo Testamento es la luz del sol. Al leer la historia del Antiguo Testamento no puedo decir esto. Su salida está preparada como la mañana. Cristo brilla como el camino, la verdad y la vida tanto en la historia del Antiguo Testamento como en la del Nuevo. Su instrucción a Israel desde el Monte Sinaí es la misma luz poderosa que se expresó en sus enseñanzas cuando se reveló en persona como el gran Maestro, el Hijo del Dios Infinito. Todas sus palabras son certeza y verdad (Manuscrito 142, 1904, párr. 7-9).

El tema central de la Biblia, el tema alrededor del cual se agrupan todos los demás del Libro, es el plan de la redención, la restauración de la imagen de Dios en el alma humana. Desde la primera insinuación de esperanza que se hizo en la sentencia pronunciada en el Edén, hasta la gloriosa del Apocalipsis: "Y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes"s( Apocalipsis 22:4 ), el propósito de cada libro y pasaje de la Biblia es el desarrollo de este maravilloso tema: La elevación del hombre, el poder de Dios, "que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo". 1 Corintios 15:57 . Allí contemplamos la Majestad de los cielos tal como se humilló para convertirse en nuestro sustituto y garante, para luchar a solas con las potestades de las tinieblas y obtener la victoria a favor de nosotros. Una reverente contemplación de estos temas no puede menos que suavizar, purificar y ennoblecer el corazón, y al mismo tiempo inspirar a la mente nueva fortaleza y vigor (The Signs of the Times, 18 de abril de 1906, "Our Great Treasure-House", párr. 1; parcialmente en La educación, p. 125).


Juan 8:54-58   

1 Corintios 1:26-29   

26 Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; 27 sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; 28 y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, 29 a fin de que nadie se jacte en su presencia.


Hebreos 9:11-15

11 Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación, 12 y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención. 13 Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne, 14 ¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo? 15 Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna.

Salmos 122

1 Yo me alegré con los que me decían:A la casa de Jehová iremos. 2 Nuestros pies estuvieronDentro de tus puertas, oh Jerusalén. 3 Jerusalén, que se ha edificadoComo una ciudad que está bien unida entre sí. 4 Y allá subieron las tribus, las tribus de JAH,Conforme al testimonio dado a Israel,Para alabar el nombre de Jehová. 5 Porque allá están las sillas del juicio,Los tronos de la casa de David. 6 Pedid por la paz de Jerusalén;Sean prosperados los que te aman. 7 Sea la paz dentro de tus muros,Y el descanso dentro de tus palacios. 8 Por amor de mis hermanos y mis compañerosDiré yo: La paz sea contigo. 9 Por amor a la casa de Jehová nuestro DiosBuscaré tu bien.

Salmos 15

1 Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo?¿Quién morará en tu monte santo? 2 El que anda en integridad y hace justicia,Y habla verdad en su

corazón. 3 El que no calumnia con su lengua,Ni hace mal a su prójimo,Ni admite reproche alguno contra su vecino. 4 Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado,Pero honra a los que temen a Jehová.El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia; 5 Quien su dinero no dio a usura,Ni contra el inocente admitió cohecho.El que hace estas cosas, no resbalará jamás.

Salmos 24

1 De Jehová es la tierra y su plenitud;El mundo, y los que en él habitan. 2 Porque él la fundó sobre los mares,Y la afirmó sobre los ríos. 3 ¿Quién subirá al monte de Jehová?¿Y quién estará en su lugar santo? 4 El limpio de manos y puro de corazón;El que no ha elevado su alma a cosas vanas,Ni jurado con engaño. 5 El recibirá bendición de Jehová,Y justicia del Dios de salvación. 6 Tal es la generación de los que le buscan,De los que buscan tu rostro, oh Dios de Jacob. Selah 7 Alzad, oh puertas, vuestras cabezas,Y alzaos vosotras, puertas eternas,Y entrará el Rey de gloria. 8 ¿Quién es este Rey de gloria?Jehová el fuerte y valiente,Jehová el poderoso en batalla. 9 Alzad, oh puertas, vuestras cabezas,Y alzaos vosotras, puertas eternas,Y entrará el Rey de gloria. 10 ¿Quién es este Rey de gloria? Jehová de los ejércitos,El es el Rey de la gloria. Selah

Éxodo 33:18-23

18 El entonces dijo: Te ruego que me muestres tu gloria. 19 Y le respondió: Yo haré pasar todo mi bien delante de tu rostro, y proclamaré el nombre de Jehová delante de ti; y tendré misericordia del que tendré misericordia, y seré clemente para con el que seré clemente. 20 Dijo más: No podrás ver mi rostro; porque no me verá hombre, y vivirá. 21 Y dijo aún Jehová: He aquí un lugar junto a mí, y tú estarás sobre la peña; 22 y cuando pase mi gloria, yo te pondré en una hendidura de la peña, y te cubriré con mi mano hasta que haya pasado. 23 Después apartaré mi mano, y verás mis espaldas; mas no se verá mi rostro.

Salmos 5

1 Escucha, oh Jehová, mis palabras;Considera mi gemir. 2 Está atento a la voz de mi clamor, Rey mío y Dios mío,Porque a ti oraré. 3 Oh Jehová, de mañana oirás mi voz;De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré. 4 Porque tú no eres un Dios que se complace en la maldad;El malo no habitará junto a ti. 5 Los insensatos no estarán delante de tus ojos;Aborreces a todos los que hacen iniquidad. 6 Destruirás a los que hablan mentira;Al hombre sanguinario y engañador abominará Jehová. 7 Mas yo por la abundancia de tu misericordia entraré en tu casa;Adoraré hacia tu santo templo en tu temor. 8 Guíame, Jehová, en tu justicia, a causa de mis enemigos;Endereza delante de mí tu camino. 9 Porque en la boca de ellos no hay sinceridad;Sus entrañas son maldad,Sepulcro abierto es su garganta,Con su lengua hablan lisonjas. 10 Castígalos, oh Dios;Caigan por sus mismos consejos;Por la multitud de sus transgresiones échalos fuera,Porque se rebelaron contra ti. 11 Pero alégrense todos los que en ti confían;Den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes;En ti se regocijen los que aman tu nombre. 12 Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo;Como con un escudo lo rodearás de tu favor.

Salmos 51:7-15

7 Purifícame con hisopo, y seré limpio;Lávame, y seré más blanco que la nieve. 8 Hazme oír gozo y alegría,Y se recrearán los huesos que has abatido. 9 Esconde tu rostro de mis pecados,Y borra todas mis maldades. 10 Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,Y renueva un espíritu recto dentro de mí. 11 No me eches de delante de ti,Y no quites de mí tu santo Espíritu. 12 Vuélveme el gozo de tu salvación,Y espíritu noble me sustente. 13 Entonces enseñaré a los transgresores tus caminos,Y los pecadores se convertirán a ti. 14 Líbrame de homicidios, oh Dios, Dios de mi salvación;Cantará mi lengua tu justicia. 15 Señor, abre mis labios,Y publicará mi boca tu alabanza.

Oseas 14:4    CB   

4 Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos.

Juan 7:30    CB   

30 Entonces procuraban prenderle; pero ninguno le echó mano, porque aún no había llegado su hora.

Juan 8:20    CB   

20 Estas palabras habló Jesús en el lugar de las ofrendas, enseñando en el templo; y nadie le prendió, porque aún no había llegado su hora.

Juan 12:27    CB   

27 Ahora está turbada mi alma; ¿y qué diré? ¿Padre, sálvame de esta hora? Mas para esto he llegado a esta hora.

Juan 1:1-18    CB   

1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2 Este era en el principio con Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. 5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella. 6 Hubo un hombre enviado de Dios, el cual se llamaba Juan. 7 Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él. 8 No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz. 9 Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo. 10 En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció. 11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. 12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; 13 los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios. 14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. 15 Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo. 16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. 17 Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. 18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.

Juan 6:35    CB   

35 Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.

Juan 6:41

41 Murmuraban entonces de él los judíos, porque había dicho: Yo soy el pan que descendió del cielo.

Juan 6:48

48 Yo soy el pan de vida.

Juan 6:51

51 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.